Son tantas situaciones que provocan en mi un sentimiento nada fácil de sentir: DESILUCIÓN.
A veces las cosas se dan como uno quiere, pero al vivirlas nos damos cuenta que no son como uno esperaba... Como me pasó recientemente: pasó lo que hace tanto tiempo esperaba, lo que tanto queria, lo que tanto anhelaba, y en ese momento, el cual suponía ser algo hermoso, no lo fue... Lo que yo queria que pase pasó, pero la sensación, la forma en que se dió, el sentimiento no fue el que esperaba. Y cuando las cosas no salen exactamente como uno quiere, se caen los ideales, se anulan las esperanzas, se rompen las ilusiones...
Será que yo espero mas de lo que las cosas alguna vez pueden llegar a ser... es que a veces pienso que todo puede ser, todo puede suceder, todo se puede alcanzar, todo puede pasar.. cuando, realmente, no siempre es así.
Y cuando con más optimismo trato de ver las situaciones, es cuando pasa algo que me obliga a volver a ver las cosas con el realismo de siempre... Nadie dijo que la vida fuera fácil, pero tampoco nadie avisó que puede pegar tan fuerte, herir tan profundo...
Son cosas que hacen a la experiencia, se supone que de los errores se aprende... Tengo entendido que cuando uno se equivoca no debe volver a cometer ese error, puesto que ya conoce el resultado. Pero a veces el sabor de lo prohibido es tan dulce y tentador, y la carne es débil... todos caen en la tentación alguna vez. A veces es necesario equivocarse muchas veces de la misma forma hasta lograr entender que eso no es bueno, que nos hace mal, que es perjudicial, peligroso... en fin: malo.
Recuerdo que en esta vida tropecé muchas veces con la misma piedra hasta entender que ese no era el camino correcto... a veces somos tan obstinados que nos cuesta aceptar las cosas como son. El orgullo pudo ganarme más de una vez...
Son cosas de la vida, situaciones reales, que a más de uno(yo) le suelen pasar...
